Las almendras confitadas, también provenientes de California, se ofrecen en envases de 250 gramos, cubiertas con una capa dulce y crujiente. Son ideales para acompañar postres o como un dulce capricho a cualquier hora del día. Su combinación de dulce y crocante las convierte en un deleite perfecto para los amantes de los frutos secos.